14 de marzo de 2010

Castillo de Constantina


Esta semana, ojeando un periódico, descubrí con tristeza una noticia que hablaba sobre "mi pueblo", Constantina. Si porque yo soy Jerezano de nacimiento, barcelonés en mi infancia y sevillano por afincamiento, pero mi pueblo de siempre ha sido Constantina, pues es el pueblo de mis padres, de mis abuelos y de casi toda mi familia, es el pueblo donde volvíamos todos los veranos desde Barcelona para no olvidar nuestra tierra, es el pueblo donde, siendo un niño, tu vida cambiaba todo un mes, pues para un chico de ciudad veranear en un pueblo de la sierra es toda una aventura, los baños en el río, el pan con aceite y azúcar, la leche con nata, las tardes en el frescor del salón de una casa de pueblo, salir a la calle solo, sin limite de distancia, las fiestas, el campo, burros y mulas por la calle, toda una serie de acontecimientos para un niño.
Y que decir de la juventud, la primera cerveza, la primera discoteca, el primer cubata, el primer cigarrillo, la primera borrachera, el primer amor...
Esta semana se ha caído la torre del homenaje del castillo, el castillo de Constantina no es un gran castillo, de hecho, para cualquier visitante, el castillo no representaria ningún monumento espectacular y probablemente pasaría desapercibido, pero es nuestro castillo, tenemos nuestros recuerdos, nuestras historias, nuestras anécdotas, es nuestro castillo siempre estuvo ahí y seguirá estando con o sin torre, porque de niños subíamos por las tardes y jugábamos entre las almenas y detrás del santo, los niños seguirán jugando allí. Por que ya no tan niños subíamos por la noche, con una botella de ginebra sin marca y la Konga de cola y el radio cassette de doble pletina de ecualizador de 5 bandas, estéreo por supuesto, y en las noches claras se veía Sevilla y bajábamos con el punto para seguir la noche, (¿Ahora donde a la disco de abajo o a la de arriba?)los jóvenes seguirán subiendo. Porque las noches de luna subíamos en pareja y bajábamos en grupos, los chicos hablando de las chicas y las chicas hablando de los chicos, porque se han vivido muchas cosas durante muchos siglos, el castillo de Constantina seguirá estando y para nosotros seguirá significando algo especial.
No se si las autoridades que han permitido que este desastre suceda, serán capaces de arreglarlo, pero mucho me temo que los sentimientos de un pueblo no sean suficiente para que estas reaccionen, aunque tarde, actuando sobre este monumento declarado de interés Histórico-Artístico y restaurándolo para su conservación.De lo que estoy seguro es de que al igual que nuestros abuelos, nuestros padres y nosotros mismos, nuestros hijos seguirán subiendo al castillo, esté como esté, y ni los políticos ni la absurda burocracia, evitaran que siga siendo nuestro castillo.

4 comentarios:

  1. Hola querido primo,
    Me ha sorprendido el artículo del Castillo, debido al desconocimiento de su existencia que tenía. Me he sentido triste de no conocer detalles tan bonitos de Constantina pues la mitad de mi viene de él. Está claro que cuando las niñaas sean un poco más grande, tendremos que hacer una excursión al pueblo y espero que nos orientéis, para poderlo conocer mejor.
    Un fuerte abrazo de tu primo, Dani.

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  2. Eso esta hecho, aqui tienes tu casa. Muchas gracias por dejarme tu comentario, me ha hecho mucha ilusion. Besos para todos.

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  3. A mis queridos sobrinos, entrambos dos: mi cariño. Me he sentido admirado, conmovido y -por que no decirlo- emocionado, al visitar hoy este blog de Álvaro, y encontrarme con ese sentimiento constantinero tan bien expresado en miembros de la familia que, aunque nacidos fuera del solar común a todos, venís a demostrar con vuestros expresados sentires que vuestras raíces, muchas de ellas nuevas, renovadas y reverdecidas en ilusiones y esperanzas en otras tierras, siguen estando, no obstante, partes de ellas, arraigadas y hundidas con firmeza en la de vuestros mayores.

    Referente al derrumbe de la Torre del homenaje del Castillo de Constantina, a la que nosotros los constantineros siempre hemos denominado desde tiempos muy remotos “La Almena” -posiblemente por haber estado rematada en su origen con un pretil almenado de defensa- quiero dejar constancia en este blog de un comentario dejado en la página web Sevilla actualidad.com bajo el título de “UN ABROCHADO METALICO PARA UNIR LAS TORRES DEL CASTILLO DE CONSTANTINA” y que por su escasa limitación de caracteres tuve que desglosar en dos y, aun así, quedarme insatisfecho por su cortedad resultante en un tema de tanto hilo:

    Félix Meléndez • hace 1 semana
    Creo que responsabilizar de manera principal al alcalde de Constantina del derrumbe de la Torre de su castillo –nuestra Almena- es diluir las verdaderas responsabilidades que no son otras que las del propio Ayuntamiento de Sevilla que durante siglos y hasta hace muy poco tiempo fue su propietario sin importarle en absoluto su existencia y, sobre todo, aquí y ahora, a los componentes de la Diputación provincial –que no se para que sirve al existir un ente común a todos los andaluces cual es la Junta de Andalucía que, dicho sea de paso, tampoco debe escaparse del desaguisado.

    Ellos, con sus medios y posibilidades, son los auténticos responsables del desastre, propiciando primero, hace unos años, una restauración de chichinabo, cargando la torre con mas peso y eludiendo, por ser medios caros, el abrochado metálico de la torre mientras se hubiera trabajado no solo en la consolidación de los cimientos sino saneando y uniendo llaga a llaga cada una de sus piedras tanto en sus revestimientos interiores como exteriores. Parece de chiste pero a pesar de los siglos que le han querido quitar los arqueólogos al castillo se nos ha desmadejado de viejo. Pero no importa, ha ocurrido en el pueblo peor mirado y atendido de toda la mal llamada Sierra Norte de Sevilla que no es otra que la llamada desde tiempo inmemorial Sierra de Constantina.

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  4. Gracias tito.
    Mi sentimiento ha de ser constantinero, no podria ser de otra forma, eso no significa que no me pueda sentir a la vez de varios sitios, el ser hijo de emigrante te da ese pequeño problema de identidad, sin embargo con el tiempo descubres que en realidad es una ventaja, ya que uno es de donde se siente no de donde le dicen.
    En cuanto a nuestro querido pueblo, mucho habria que comentar sobre ese "mal miramiento" de muchos. Como, siendo el centro de la comarca y la localidad mas grande y por consiguiente la mas importante de la zona, sufre ese menosprecio constante, ¿habra que pensar en intereses de terceros? ¿o quizas en nuestra propia indolencia?, sin duda seria este un tema largo de comentar.

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